Noche diferente la de ayer. Aun no habia visitado La Bola y tocó estrenar el local de Pablo en buena compañia para ver a La BoTiKa: El monstruo de las 2016 cabezas. Una sátira de la política cacereña donde no se salva ni Dios (ni la Virgen de la Montaña en este caso).
Un escenario por donde pasaron desde la alcaldesa (la mejor caracterización sin duda),la superconsejeresa, Vela, Pavón, Floriano o «MariToñi», hasta personajes de la farandula como Bebe, Soyaya o los cocineros de Atrio.
Algunas partes estaban fuera de lugar, demasiado tiempo dedicado a Womad o Atrio y sobre todo una caracterización de Guillermo, vestido de monaguillo con una superBellota por incensario, al que no supieron exprimirle el jugo que podia dar vestido de esa guisa.
Crítica, sátira y noche cacereña. Que espectáculos como este sirvan para despertar una ciudad a la que algunos se empeñaron en adormilar, y que poco a poco va desperezandose con salas como La Bola, cogiendo el toro por los cuernos con la ordenanza de ocio o programaciones de conciertos como las que vivimos en un hípico que ha recuperado sus buenos tiempos, donde auno no han acabado de desmontar un escenario y ya están montando el siguiente.
Cáceres se muere resucita.