Más o menos la historia es así:
Ibarretxe anuncia que quiere hacer una «consulta popular» para pedir la independencia de Euskadi, una frontera con pinchos que le separe de los españoles, que le paguemos cada uno el piso a su hija, que le manemos jamones pata negra por navidad, que para entrar en el país vasco nos pongamos txapela, cortemos troncos y levantemos piedras… por pedir que no quede.
Zapatero le responde: «vale tio, yo te voy a escuchar todo lo que tu quieras, capitán spok, pero tu me vas a oir a mi también, que me tienes hasta los mismisimos»
Y algunos le seguiran llamando Bambi a Zapatero…